ABARRUNTAR: Tener un presentimiento, hacer una predicción, barruntarse algo.
ABERRUNTO: Acción y efecto de abarruntar. Barrunto. Berrunto. “Le dio aquel aberrunto y vendió la mula”
ACENACHARSE: Término despectivo sinónimo de engordar, asemejarse mas de lo normal a los cenachos, a los gorrinos, eso sí, únicamente en lo que al peso se refiere.
ACIPÁMPANO: Apampanao. Persona que gozando de buena salud, vive en estado casi vegetativo. Se nutre –muy bien a juzgar por sus abundantes carnes-, respira, pero no se entera de nada más.
ACHANTAO: 1. Estado yaciente y dormilón del que se encuentra acostado.
2 . Fig. Estado, por el contrario, muy despierto y atento a los acontecimientos, del que está “viéndolas venir”, y no da del todo la cara.
ALPEDUQUE: Especie de calcetín corto y de lona, pareja inseparable de las abarcas. Idóneos como ninguna otra cosa para faenas como el arranque. No se les pegaban los molestos cadillos.
AMAGARSE:1. Comer, generalmente en grandes cantidades. “Se amagaron la sartená de migas en un pispás.”.
2. Acostarse. Achantarse. “El zanguango está todavía amagao”
3. Agacharse. Inclinarse en el trabajo, doblar la “riñonera”.
AMBROLLERO: Amante del lío, la improvisación y el embrollo. También se usa la voz embrolláor.
ARDILES: Úsase siempre en plural, en tono irónico para adornar las buenas trazas, maneras y condiciones que tiene la persona de quién se habla. “¡Vaya ardiles que tiene, como pa liarse a trabajar!”
ARRANCÁOR: Aparece en el listado no tanto por el ahorro que presenta de la letra “d”, sino por la singularidad de la acentuación, distinta a la que presentan los nombres de los oficios –cantaor, aperador, segador, etc- que son todas palabras agudas. De la misma característica tenemos también aquí a peléaor, esquiláor y otras que después añadiré.
ARRENDAR: Imitar haciendo burla. Viene de arremedar y remedar. Eran continuas las quejas a los maestros, hermanicos, parientes.... del tono: “fulano mestá arrendadndo”
ARREÑAL: Así se denomina a buena parte de los terrenos que rodean al pueblo y que, desde que el pueblo es pueblo, servía como zona de pasto a las caballerías y en las últimas décadas –y aún hoy- para tirar las basuras los vecinos. En el castellano correcto se dice herreñal o herrenal, es decir terreno provisto de herrén, forraje para los animales.
ASTIAL: Dícesele a hombre o muchacho que es burro, pollino y animal en grado sumo, tirando más bien a salvaje.
ATARRE: ¿Quién iba a decir que esta pieza de las albardas que tiene como función la de impedir que se vaya hacia delante se escribía ataharre?
ATASCAERO: Estar en medio de un problema de difícil salida.
AVERÍO: Según el diccionario conjunto de aves domésticas. En el habla del lugar equivale a ganado. “Me dejao el averío en el corral del Carabuco”.
BARRENO: Colmena silvestre de abejas. A lo mejor se debe decir berrendo.
BLINCO: Salto, brinco. “El cinco, si me ............doy un blinco” se decía en una cancioncilla infantil. Prudencia.
BOQUIÁS: Boqueadas. Angustiosa búsqueda de aire de los gorrinos, heridos en la mesa de la matanza, viendo cercana su muerte en tanto se alegran los que ansían degustar sus carnes. Ahora – si nuestros antiguos levantaran la cabeza- huimos más del cerdo que él de nosotros.
BULLERENGUE: Organo genital femenino. “Tócate el bullerengue, a ver si te pica”. Viene de la voz bullarengue que antiguamente era una prenda que se colocaba en la parte posterior de la falda para darle volumen, es decir una prótesis del trasero, un wonderbra del culo.
otra manera se aplica en las mismas ocasiones que asno, burro y jumento pero adjudicado a las personas.
CALORIZAS: Sofoco. “Qué calorizas le entraron cuando tuvo que habla”.
CALZAERAS: Calzaderas, cuerda delgada de cáñamo para atar las abarcas y sobre todo los piales. Era un “complemento” imprescindible para la gente del campo.
CARCAMAL: 1. Palo que se introduce entre los tendones de las patas de los gorrinos y que además de mantenerlo espatarrao sirve para suspenderlo “del palo de colgar”.
2. Individuo viejo y decrépito.
CATE: Puñetazo, o como se decía antes en un intento de quitarle fuerza a la expresión (que bastante llevaba por sí sola), “golpe de mano airada”. Lo de airada debía ser a la vez por el aire que llevaba el brazo y por la ira que lo empujaba.
CERILLAS: Manchas que de manera harto frecuente llevaban los niños en la cara. Aunque no costaba nada ensuciarse todos recordamos con horror el momento en que las madres cuando nos veían en medio de la calle echaban mano de su pañuelo y de su saliva y restregaban con fuerza para eliminarlas, ante los ladeaeros de cabeza y quejas de los cerillosos.
CENACHO: 1. EL DRAE lo define como el recipiente hondo y flexible en que se llevan los alimentos, las antiguas espuertas del pan, que se utilizaban para todo tipo de compras; el precedente de las modernas bolsas que nos regalan en los supermercados.
2. Cerdo, gorrino, marrano (con perdón).
CIBANTO: Rica palabra que presenta dos significados exclusivos.
1.Espacio que delimita dos bancales. Si bien se dice lindes cuando son de secano se reserva cibanto para el regadío. Dado el alto aprovechamiento de las huertas -¡Quién te ha visto y quién te ve!- era muy estrecho.”Se dejó cáer un rato en el cibanto”
2. Mujer, también algún varón, de no muchos años pero de no pocas carnes. Siempre se ha usado de manera despectiva. “¡Está hecha un cibanto!,¡Está apañá!” COMPLETILLAS: Voltereta, aunque a veces no se completaba y se convertía en costalá. No eran santo de devoción de aquel padre que aconsejaba a los maestros de su hijo con aquello de que “Más cuentas y menos completillas”. Cumpletilla, también se dice.
CONSTIPAUZO: Estado de salud en el que se sufen los primeros síntomas del resfriado. “No ha venío porque está una miaja constipauzo”.
CONTINO: Continuo, de manera continuada. Quevedo también usaba esta palabra al referirse al oro del que decía que “de contino anda amarillo”.
CORTICO: Persona no muy inteligente. “No le hagas caso, que’s mu cortico el pobre”.
CUCHA: Interjección de la que si tenemos que especular se me ocurre decir que puede ser un apócope? de ¡escucha (a este)! “¡ Cucha, qué tío más sinvergüenza!
CUESTANETO: Trozo de camino con una pronunciada pendiente.
CHASPIÓN: Rozamiento, efecto de lo que pasa rozando. “Menos mal que le dio de chaspión, si le da de lleno no lo cuenta!”
CHORRILERA: Hilera, fila continuada. En los años sesenta alucinábamos los chiquillos al contemplar la chorrilera de coches que pasaban por el pueblo en los días de romería al Santuario de Cortes, en su camino de retorno.
CHOSPE: garito, antro, casucha destartalada o ruinosa. “¡Menudo chospe tienen los quintos!”
EFARATAR: Deshacer, estropear, lo previamente hecho. Proviene sin duda alguna de la voz desbaratar, que como implica su significado, se ha estropeado su morfología con el tiempo.
EFARRAR: 1. Dar comienzo, empezar. Se usa casi de manera exclusiva en el juego de la bolea.
2. En forma reflexiva, resbalarse. “Ten cuidao, cerca la esquina, que puedes efarrarte”
EFARRE: 1. Acción y efecto (que dice el diccionario que sabe) de efarrar. Se efectúa desde de la línea de salida, que es una raya que se traza con el pie, en sentido perpendicular a la dirección del tiro.
2. Resbalón.
EJARABILLARSE: Lesionarse. “Se ha ejarabilláo jugando a la bolea”.
EMPENTARSE: Apoyarse. Las más de las veces se utiliza como reproche “No te empentes tanto, que tiras la carga”
ENFLOSCAR: Acción de ponerse manos a la obra en cualquier asunto, sobre todo si se resulta algo liado, por el mucho trabajo o por la complicación de la tarea.
ENGARABITARSE: Trepar, subir a lo alto de una árbol, tejado, etc..”Como venía la vaquilla......¡tardó en engarabitarse al carro!”
ERRIBAR: Acción de echar abajo o tirar a tierra. “L’erribó dos dientes del cate que le dio” No es verbo intransitivo a pesar de siempre denota movimiento.
ESPAMPLONEARSE: Acción que tiene por fin el de contribuir al aumento de la comodidad y el bienestar del cuerpo de uno, tanto en el aspecto íntimo (eructo, ventosidad, etc.) como en el exterior (recostarse, desperezarse, etc.)
ESPINDARGA: Fémina delgada y larguirucha.
ESPORTILLAO: Estado en el que queda una olla, plato o vaso cuando a causa de un golpe salta la pintura o algún trozo pequeño que no deja aún inútil al objeto.
ESRABOTAR: 1.Quitar el rabo aun animal.
2. Arrancar o segar en los surcos que atravesaban y que remataban las besanas. En esta labor eran muy pocos los decididos. El que más y el que menos, si podía, se hacía el remolón para “arrimarle”más parte a los otros.
ESTURREAR: Vocablo totalmente válido según el DRAE que significa desparramar, dispersar.
ESTUTO: Astuto. El colmo de la astucia parece ser el escabillo,, una vulgar herramienta; de ahí el dicho local de “estar más estuto que un escabillo”
FALDATE: Hartazón, remataera de trabajar en las labores del campo que se daban muy a menudo nuestros antiguos. Ahora se usa más bien para indicar excesos en otros ámbitos, más placenteros.
FOBETÁ: Bofetada. Bofetá. El autor de esta variación en la palabra bien pudo ser alguien que por las circunstancias que en ese momento le afectaran no tuvo ni la paciencia ni tranquilidad de ánimo para articularla correctamente.
FOLLETO: Propiedad de lo que está menos apretado de lo que debiera. Ahora a lo mimso los cursis lo definen como fofo. “¡Anda, dále aire al balón que está folletó del tó!”
FORONDUSCA: De orondo y más cercanamente de forondo. Epíteto que se aplica a toda persona presuntuosa y vana.
GALGO-LUCAS: Persona a la que le gustan mucho los dulces. Lucas debe ser el nombre de la persona de Robledo más galga de todos los tiempor. “Qué galgolucas estás hecho”.
GALUMBO: voz en la que ha derivado su palabra de origen, balumba, que se usa para designar las cosas que ocupaban mucho volumen, a veces demasiado. Así, solía motivo de orgullo para algunos acarreadores que eran capaces de “echarle mucho galumbo de mies a los carros o galeras”
GARBANA: Perrería, zamarrería, generalmente momentánea sobre todo en los tiempos de las calorizas. Dicho con corrección sería galbana.
GAZNÁPIRO. DRAE lo define como palurdo, torpe. En el pueblo el significado es : persona que va de lista e intenta siempre aprovecharse de los demás, aunque nunca lo consigue.
GOLISMERO: el que practica eso de golismear, “informarse” con avidez de los asuntos –preferiblemente morbosos o negativos- de los demás.
GUAJERRO: Garganta, gaznate de personas y animales.
GUARIN: Nombre que se le da al más pequeño de los hermanos, tanto en el caso de los gorrinos como en el de las personas.
GÜEVUDO: El que tiene muchos güevos, es decir, mucha terquedad, además de cabezonería.
GUISCARSE: rascarse, toquetearse, generalmente con fruición, en distintas partes del cuerpo como la entrepierna, o la boca. El motivo es confesable, cosquillas, molestias locales, algo que bulle.... “¡Deja de guiscarte en los dientes con el palillo que te vas a armar cantera!”
HARTAZÓN: Aumentativo de hartazgo, no tanto de comer, sino mas frecuentemente, de trabajar. Esta palabra está en desuso por la sencilla razón de que ha desaparecido la causa que la propiciaba.
HITA: Piedra plana. Cuando más se nombra es durante la práctica del juego de la bolea. El “picar” la bola en la hita proporciona mayor velocidad al lanzamiento.
JINJOLIO: Comistrajo, comida de malas composturas, y peor presentación.
JUGUESCA/ESTAR ENJUGUESCAO: Esta voz está presente en la versión local del romance de Gerineldo: “en medio de la juguesca los dos quedaron vencidos”, siendo esta eminentemente erótica.
LEJÍO: No es un tipo especial de lejía, sino un sinónimo de arreñal. Evolución de ejido.
LOBA: 1. Pequeño espacio que permanecía sin labrar en la labor y que llegad0 el momento del arranque o la siega provocaba un pequeño descanso en los menos y envidia en los más.
2. Mujer sumamente ansiosa; “Es una loba en todo lo que se pone.”
LLENARSE: Mancharse, emporcarse la ropa ¿Dónde te has metío pa llenarte así los pantalones?”
LLUECA: 1. Clueca, gallina procreadora.
2. Mujer farruca, fresca, chula.
MAGANTO: Se aplica a las personas y a los animales que han perdido buena parte de sus carnes y presentan un deterioro palpable en su apariencia.
MATACÁN: 1. Si el DRAE lo define como una encina de pequeñas proporciones, en El Robledo es el contrario, chaparro gordo.
2. Raíces de las encinas que se quedan enterradas y que eran extraídas a base de pico.
MATACHÍN: Matarife. Persona muy apreciada a nivel local por buena parte de los vecinos. Iba sólo una vez al año pero en la mejor ocasión.
MAULAS: Palabra poco usada en la actualidad que servía para adornar las virtudes de un hombre, con significados varios parecidos a: tramposo, embustero, cobarde y otras lindezas de ese tipo. Como siempre hay algún hombre de este jaez, ha sido muy socorrido para ponerlo como mote.
MIAJA: Viene de “migaja”, aunque se aplica como sinónimo de “poco”. “Me duele una miaja la cabeza”.
MISTO: Semen. Fluido transmisor de la descendencia en los varones.
MONDONGUERA: Mondongo. Conjunto formado por el estómago y los intestinos de los animales que se sacrificaban. El del cerdo se utilizaba para la elaboración de los embutidos caseros.
MOÑIGO: 1. Excremento de la caballería. 2. Persona terca, maliciosa y tonta.
MOQUERO: Pequeño lienzo de bolsillo que las madres se empeñaban que los niños usaran para limpiarse los mocos. ¡Con lo fácil que resultaba quitárselos con la manga del jersey, por ejemplo.!
NUBE: Tormenta. Cuando llegaban los chiquillos eran sometidos a la fuerza a la quietud y al recogimiento, únicamente perturbado y entretenido con las letanías que las viejas dedicaban a Santa Bárbara
“Santa Bárbara, bendita,
que en el cielo estás escrita,
con papel y agua bendita.
tres avemarías, ¿Jesús!.”
NUBLO: Tormenta, “nube”, pero no de las normales sino de las temibles, que afortunadamente venían muy de tarde en tarde. Este vocablo se utiliza para adornar para ponderar las largas esperas . “ ¡Tié novia, pero va a verla cuando cae un nublo!”
OSCURÁNGANAS: Grado máximo de oscuridad, sobre todo si se le presupone una utilidad amorosa.
PAER: Es una pared cualquiera aunque su empleo es más adecuado cuando se refiere a la que encuentra en mal estado.
PANOCHA: 1. Panoja, mazorca o mejor dicho piña de maíz.
2. Muchacha a la que parece que le ha dado un aire. Atolondrada. También se usan sus parientes panochona y apanochá.
PANSÍO: También pansidico 1. Lo que ha madurado en exceso, de tal manera que esta “hecho gacha”. Se aplica a las frutas.
2. Tejido, o cualquier urdimbre que ha perdido bastantes hilos o tersura. “El pobre llevaba un camisón pansidico por el cuello y los codos”
PARÉ: Exactamente lo mismo que paer.
PELENDENGUES: Bolsas genitales ubicadas en el bajo vientre –algunos los tienen mucho más arriba-.
PELUNCHÓN: Aplícase a lo que tiene forma larga y delgada a modo de hilo y sobre todo a los estambres de la flor del azafrán.
PENDONICIO: Estado continuado de disfrute de los más diversos placeres con escaso control de la honra propia, claro está, a los ojos de los demás. Se aplica sólo a las mujeres, a pesar de que los hombres han sido más proclives a los excesos, que, llegado el caso, se han calificado de una manera mucho más benévola.
PEÑACINA: ¡ A quien se le diga que las peñacinas, es decir el tirarse piedras unos chiquillos a otros era una de las diversiones más excitantes! Los dos bandos en pugna casi siempre eran los mismos: los de arriba contra los de abajo; es decir los residentes en Canaleja, de la plaza parriba y los del Cubillico contra los barrios bajos.
PERA: Diabólico invento que se iluminaba al mismo pellizcar en un punto concreto de la pared, que además era en muchas casas único y solía estar en la cocina. Luego se iluminaron las habitaciones y por último –y seguro que todavía hay muchas a oscuras- las cámaras.
PERDIZO: Manera más económica en palabras para denominar al macho de perdiz.
¡PICHOOO!: es lo contrario, tan contrario como el día y la noche a ¡tuba! ¡tuba!
PIMPLE: Acción y efecto de empinar el codo, sobre todo si lo que se levanta es vino.
PIUJAR: Trozo pequeño de tierra o lote de ganado que el amo daba a su asalariado como complemento de la exigua paga. Se dice que a veces se daba para aplacar conciencias.
QUEMAZÓN: Irritación desmesurada, sinvivir, por lo general momentáneo, ante el que poco se puede hacer. “Tengo una quemazón de ver lo que veo...”
QUERINDANGA/O: Amante. “Se ve que tiene por ahí alguna querindanga y la mujer se ha enteráo”.
RABOTE: Se le dice al perro o al gato que no tiene rabo, o lo tiene muy corto.
REBULLE: Se aplica al que no para de bullir, no deja de moverse.
RECALQUE: Malestar muscular que se origina en las personas que no están acostumbradas, tras la realización de algún trabajo fatigoso.
“- Estoy recalcao deltó”
- ¿Pos y’eso?
- Pos ná, que ayer estuvimos subiendo el poco trigo a la cámara”
REFRIOR: Encontramos esta voz, además en el romance de Gerineldo en el verso 18 de la versión conocida en este pueblo donde dice:”Al refrior de la espada, la princesa lo ha sabido”
REJUNTAR: Reunir lo que estaba disperso. “Rejunta las granzas de los garbanzos, zangarrián”
REJUNTARSE: 1. Reunirse. 2. Amancebarse, vivir sin papeles. Pareja de hechos- más que de hecho-..
RELEJE: Mancha que se aprecia en la cara de los niños o en la ropa de cualquier persona, por limpia que sea. “¡Vaya releje que llevas en la pechera, maéstro!”
REMORMOR: Molesta continua y más liviana que el dolor. “¡Tengo un remormor desde anoche en las jodías muelas, que no me deja asolazarme”
RENDRIJA: Es la misma rendija, pero dicho de manera mas complicada. ¿Quién dijo que el lenguaje popular tendía a hacerlo más simple!.
REPELLARSE: Acción de apoyar la espalda o el hombro y que traía dos consecuencias: la primera el “llenarse” de la cal de la pared y la segunda, el ser advertido –con buenas o no tan buenas maneras- por los demás.
REPIJCO: Pellizco. “Dame un repijco pan”.
REZAERO: Acción de refunfuñar, hablar por lo bajini. Los niños rezábamos mucho antes en la escuela.; en voz alta cuando llegaba el momento de las oraciones y por lo bajo cuando volvíamos a nuestro pupitre después de que el maestro nos pegara con la vara o la correa. “Deja el rezaero y si tienes algo que decir, me lo dices en los morros”•
RIBÚS: Así se denomina a los restos, escasos y de mala calidad, de lo que se ha recogido. “Recoge el ribús del pez de trigo y se lo echas a las gallinas”
RUÑACO: Persona enflaquecida en extremo. Aunque también en medio. Por todo.
SABANEO: Término que se emplea para recordar al afectado que ha sido víctima de una amplia derrota o de un buen escarmiento.
SAMUGO: Hombre que adolece de escasa viveza y don de gentes. ¡Y que suele salirse con la suya!
SANDUNGUERO: Parece mentira que el azar reúna dos voces tan contrarias sin pretenderlo. El sandunguero es desde luego la antítesis, lo contrario del samugo.
SANSAREJA: 1. Tipo de pájaro de fina figura. No se como diablos se llamará. No consta en el DRAE.
2. Mujer pizpireta, astuta. Suele emplearse con ánimo despectivo o desconfianza. “ ¡Menuda sansareja.....!”
¡SAPE!: ¡Tira de aquí, gato!
SARRIETA: Bolso de las mujeres, remental, donde llevan sus apechusques. Tradicionalmente era un cesto alargado donde se echaba de comer a los animales en la labranza, sin necesidad de desuncirlos.
SETAZO: Golpe seco.
SOLLEJO: Pendón. Este atributo es solo para la mujer. “¡Menudo sollejo está hecha!”.
SOPÓN: Sopa de comida mayor de lo usual. Célebre es la frase que le dedicaba la Isabel a su hija cuando llegado el tiempo de la rosa comían muchas personas en la sartén “ Tú, buenos sopones Amelieta”.
TABLAR: Tabla. Trozo pequeño, de forma rectangular en que se subdividen los huertos. “Vengo de regar el tablar de pepinos y de realzar las patatas.”
TASAJO: Persona que no vale para nada, solo para estar en medio sin hacer nada o estorbar. “Ahí se nos plantó el tasajo y ya no pudimos hacer ná”.
TENACEAR: Practicar la tenacidad. Insistir en algo de manera machacona.” Me estuvo tenaceando un rato que se lo diera”.
TENGUERENGUE: Obra o trabajo mal hecho y que en cuanto se toque se vendrá abajo o se romperá.
TERRÓN: Persona que lleva la ropa sucia y no tiene prisa por cambiarse. “Esa va siempre hecha un terrón”.
TICAS, TICAS, TICAS: Vocablo utilizado para llamar a las hembras; a las del hombre en el caso de los costarricenses, también llamados ticos ; a las gallinas cuando se le echa de comer.
TOLLÓN: Mujer de muchos kilos y mucho ánimo tranquilo. De más.
TOROZAR: Quebrar. “Se ha torozáo la pierna”.
¡TUBA!, ¡TUBA!: Expresión típica que se emplea para llamar a los perros, bien para echarles un trozo de algo de comer o bien para que se confiadamente se acerque y aprovechar su cercanía para arrearle.
VARRACO: Verraco. Macho del ganado de cerda que se deja para ejercer de semental. La envidia de muchos.
VENDO O BENDO: Orilla de las piezas del tejido de pana, que, dada su mayor resistencia se utilizaba entre otras cosas para sujetar abarcas, piales y hasta incluso a modo de correa para los pantalones.
VOLERO: Pájaro, gorrión por lo común, que está dando sus primeros vuelos y que si tiene la desgracia de caer en manos de chiquillos, tiene la muerte segura.
ZACAPELLA: 1. Riña, jaleo, tropel, escándalo.
2. Apresuramiento, prisas excesivas.
ZALANDRO: Trozo, generalmente de vianda, que es de mayor tamaño del usado normalmente. Zarabil.
ZANCALEAR: Muchachos por la calle haciendo el vago.
ZANGUANGO: Muchacho indolente y mal trazado, “muy dejao caer”, características que por lo visto le impiden moverse con alguna gracia o habilidad.
ZARAMINGA: Femenino de zaramingo, y también de zaramango. Zaramanga.
ZARZANEAR: Husmear, buscar algo. También se dice zarcenar y zarcenear.“Quién está zarzaneando ahí dentro”
ZORROMOSTRO: Bulto, abultamiento. “Le ha salío un zorromostro detrás de la oreja, que no me gusta nada”.